La LUZ de Navidad
La luz es necesaria. Desde el principio, Dios habló y creó la luz física. Génesis 1:3 dice, "Y dijo Dios: sea la luz; y fue la luz." En el aspecto espiritual, Dios también vio que el ser humano tenía muchas necesidades. Leemos lo siguiente en Lucas 1:78-79 "Por la entrañable misericordia de nuestro Dios, con que nos vistió desde lo alto la aurora, para dar luz a los que habitan en tinieblas y en sombras de muerte; para encaminar nuestros pies por camino de paz".
En medio de tanta oscuridad, Dios mandó a Jesús para ser luz. Por eso recordamos la Navidad. ¡Jesús nació para ofrecer luz, vida y salvación a un mundo oscuro y moribundo!. Jesús dijo en Juan 12:46 "Yo, la luz he venido al mundo,para que todo aquel que cree en mí no permanezca en tinieblas."
No necesitamos seguir en tinieblas. El enemigo de nuestra alma, Satanás, quiere cegarnos para no ver la luz. 2 Corintios 4:4 dice, "En los cuales el dios de este siglo cegó el entendimiento de los incrédulos, para que no les resplandezca la luz del evangelio de la gloria de Cristo, el cual es la imagen de Dios". Dios, en cambio, según Hebreos 26:18, quiere que los que andan en tinieblas abran sus ojos....
"Para que se conviertan de las tinieblas a la luz, y de la potestad de Satanás a Dios; para que reciban, por la fe que es en mí (Jesús), perdón de pecados y herencia entre los santificado" Las luces de la Navidad se encuentra en Jesús, la luz eterna de este mundo. Juan 8:12 dice, "Otra vez Jesús les habló, diciendo: Yo soy la luz del mundo; el que me sigue, no andará en tinieblas, sino que tendrá la luz de la vida."
¡Jesús es el mejor regalo!